- El proceso hacia el liderazgo
- La victoria en Jerez: el punto álgido
- Los desafíos que le esperan: Alcañiz y Valencia
- Inicios en el motociclismo y su admiración por Marc Márquez
- Futuro en el horizonte: Moto2 como objetivo
Mario Mayor, el joven piloto de Fontellas, está a punto de hacer realidad su sueño de ser campeón del Stock 600, una de las categorías del Mundial Júnior de Motociclismo.
Lidera la clasificación general a falta de dos pruebas: la que se disputará este fin de semana en Alcañiz, en el circuito de Motorland Aragón, y la última que tendrá lugar en el emblemático Ricardo Tormo de Valencia a finales de noviembre.
Su trayectoria ha sido una constante evolución, demostrando madurez y resiliencia ante los desafíos que se le han ido presentando en el camino.
El proceso hacia el liderazgo
El 2024 ha sido una temporada de grandes emociones para el piloto de solo 18 años. Desde sus primeras carreras hasta su histórica victoria en el circuito de Jerez, ha experimentado un crecimiento constante, destacándose como uno de los grandes talentos emergentes del motociclismo.
Con nueve puntos de ventaja sobre su principal rival, el italiano Lorenzo Dalla Porta, todo apunta a que el título será un mano a mano entre ambos.
Mario Mayor ha demostrado gran consistencia en su rendimiento, aunque también ha tenido que sobreponerse a momentos difíciles.
Uno de los más duros fue en Estoril, donde terminó octavo tras lidiar con condiciones de lluvia y una caída durante los entrenamientos.
“Era mi primera experiencia con la moto en mojado y sufrí una caída fuerte el sábado. Salí a carrera con dolor de cabeza y sin experiencia bajo esas condiciones”, confesó el joven piloto. A pesar de este revés, logró mantenerse enfocado y volver a la senda del éxito.
La victoria en Jerez: el punto álgido
Uno de los momentos clave de su temporada fue su triunfo en Jerez, un circuito emblemático para cualquier piloto español.
A pesar de no tener grandes expectativas en ese trazado, el de Fontellas encontró la fórmula perfecta gracias a su nuevo técnico. "Nunca se me había dado bien Jerez, pero este año logramos poner la moto a punto desde el primer día y dominé todas las tandas hasta la carrera", explicó.
Esa victoria fue una inyección de confianza, colocándolo en la cima de la clasificación general.
Los desafíos que le esperan: Alcañiz y Valencia
Con el campeonato acercándose a su conclusión, Mario se enfrenta a dos retos cruciales.
El primero será este fin de semana en Alcañiz, un circuito cercano a su casa que le trae buenos recuerdos.
"Motorland es uno de mis circuitos favoritos en España. Me estoy preparando igual que para Jerez y Portimao, trabajando en la puesta a punto de la moto y buscando mi propio ritmo", comentó Mario, consciente de que una buena actuación aquí podría darle la tranquilidad necesaria para llegar a Valencia con más opciones de gestionar su ventaja.
La estrategia para estas dos últimas pruebas es clara: seguir trabajando con calma, sin precipitarse, pero consciente de la presión que supone liderar un campeonato de este nivel.
“Siempre existe la autopresión porque estás luchando por un campeonato bastante prestigioso, pero intento no pensarlo demasiado y centrarme en ir carrera a carrera. Debemos mantener el excelente trabajo que hemos realizado hasta ahora, el cual nos ha dado buenos resultados”, añadió.
Inicios en el motociclismo y su admiración por Marc Márquez
Desde muy pequeño, Mario Mayor comenzó a forjar su camino en el mundo del motociclismo, una pasión que heredó de su padre.
"Mi padre me compró una moto china. Recuerdo que rodaba por el pueblo y por el polígono. Al final, mi padre se dio cuenta de que no se me daba mal y decidió inscribirme en una escuela de motociclismo, dirigida por el padre de Jorge Lorenzo. Así fue como empecé a competir a los seis años".
Mario comenzó a competir en minimotos en Palma de Mallorca, marcando el inicio de su trayectoria en el mundo del motociclismo. Aunque recuerda con cariño el viaje hacia su primera carrera, las imágenes de la competición en sí son difusas.
Sin embargo, lo que sí es innegable es su admiración por Marc Márquez, una figura que ha sido una fuente constante de inspiración.
"Siempre he estado muy atento a su trayectoria y he seguido todo lo que hace. Al final, mi sueño es ser como él, o incluso mejor", confesó el joven piloto de Fontellas.
Futuro en el horizonte: Moto2 como objetivo
Si logra conquistar el título de Stock 600, su próximo objetivo será dar el salto a Moto2, una categoría más grande y exigente.
Mario se muestra cauteloso pero ambicioso. “Mi idea es saltar directamente a Moto2, sin pasar por Moto3. Pero todo dependerá de cómo termine este campeonato y del apoyo que consiga. Aún tendría que esperar un año o dos antes de dar ese paso”, explicó.
Con el apoyo de su equipo y su familia, Mario afronta estas últimas semanas con ilusión, sabiendo que está muy cerca de hacer historia. Ganar el Stock 600 no solo consolidaría su nombre en el motociclismo internacional, sino que abriría las puertas hacia su futuro profesional en Moto2.
Este fin de semana en Alcañiz, Mario Mayor buscará dar un paso más hacia su sueño, el de convertirse en campeón mundial. La presión es alta, pero su talento y determinación lo han llevado hasta aquí, y no cabe duda de que seguirá dando lo mejor de sí para lograrlo.